He decidido procesar estas fotos en blanco y negro, me gustan de esta forma...
Esta vez he utilizado el Teleobjetivo con cabeza, no solo para captar cosas que estaban lejos, sino para hacer retratos a la distancia que me convenía para desenfocar el fondo, es decir alejándome a una cierta distancia, también para acercar objetos enfocados y desenfocados entre sí, en definitiva una forma más inteligente de utilizar este tipo de objetivos, que su misión no siempre es acercar aquello que está muy muy lejos, a veces nos interesa más bien alejarnos, y aunque el objeto esté igual de grande, el desenfoque es mayor o acercamos más los objetos entre sí.
El Tamron 18-200 mm se portó como un campeón y conseguí imágenes muy nítidas para ser un todoterreno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario